Opinión
¿Por qué es importante para el ciudadano reducir el tamaño del Estado?
Antes de empezar a hablar sobre el tamaño del Estado, es importante diferenciar las funciones que le atribuimos.
El primer grupo de funciones son las responsabilidades del Estado, es decir, las funciones clásicas por la que fue creado y que le permiten tener la autoridad y potestad para establecer las normas que regulan una sociedad, así como velar por su cumplimiento. La Asamblea Legislativa, el Poder Judicial, la policía, por ejemplo, serán entidades que surgen de estas funciones esenciales.
El segundo grupo, en cambio, son funciones accesorias: brindar productos y servicios, como la Fanal, el CNP, Recope, el ICE, entre otras, sean estos esenciales o no (salud, educación, investigación, etc.), estarían en este grupo.
Ahora bien, y teniendo en cuenta las diferencias anteriores, ¿qué beneficios tendríamos con una reducción del tamaño del Estado?
- Reducción de la burocracia: menos trámites y procedimientos administrativos harían más fácil y barato obtener permisos, licencias, etc., para desempeñar una actividad.
- Reducción del gasto público: si se reduce el tamaño del Estado, los recursos se destinarían a otras áreas, como la inversión en infraestructura o el pago de deuda pública, o mejor aún, se podría dar una reducción de los impuestos que pagamos los ciudadanos.
- Aumento de la libertad individual: se eliminarían regulaciones y restricciones que limitan la capacidad de las personas para tomar decisiones económicas o personales, con lo que mejoraría la innovación, por ejemplo.
- Mejora de la calidad de vida: si se reduce la carga fiscal y se fomenta la actividad económica, tendremos un aumento en la calidad de vida de las personas, ya que tendrán más recursos para gastar en bienes y servicios que promuevan su bienestar.
- Mayor eficiencia: esto permitiría eficientizar los servicios públicos al fomentar la competencia, lo que potencia la calidad del servicio, al mismo tiempo que reduce el costo para los ciudadanos.
- Menos corrupción: la reducción de los poderes y responsabilidades del Gobierno reduce el riesgo de que funcionarios gubernamentales abusen de su posición para beneficio personal, ya que tendrían menos oportunidades para la corrupción.
Una reducción del tamaño del Estado beneficia directamente al consumidor, aunque sin duda perjudicará a los funcionarios públicos, esto debido a una simple pero poderosa razón: los funcionarios públicos no siempre centran su interés en la sociedad, sino en el propio.
Veamos cómo evolucionó la relación de los salarios del Sector Público y el Sector Privado de Costa Rica en los últimos quince años para ejemplificar lo antes señalado:
En el 2007, el funcionario promedio del Sector Público ganaba 70 % más que un empleado en el Sector Privado. Tras quince años, cuando todos experimentamos las secuelas del penoso desempeño del Estado y sus instituciones en cualquier indicador (déficit fiscal, atención en la CCSS, seguridad, educación, desempleo, infraestructura y así sucesivamente), un funcionario público promedio gana casi el triple que en el Sector Privado, con un pico en la gestión de la pandemia por Covid-19 en 2020, cuando el único sector afectado fue el Privado.
Así las cosas, ¿cómo podría mejorarse el Estado?
- Cerrando toda institución que no agrega valor al ciudadano, como por ejemplo: el CNP, la Defensoría de los Habitantes, RACSA, entre otras.
- Aplicando la tercerización en instituciones que podrían desempeñarse mejor a través de entes privados, como sería el caso del MEP, la CCSS, Recope, etc.
- Fusionando entidades gubernamentales y administrativas, como ministerios y cantones.
- Vendiendo instituciones que desempeñan funciones no atribuibles al Estado, tales como el BCR, la FANAL, etc.
- Reduciendo el número de funcionarios que desempeñan roles públicos: diputados, asesores, regidores, entre otros.
¿Qué podemos hacer los “ciudadanos de a pie”? Por un lado, buscar el partido político que mejor nos represente, conocer los proyectos y propuestas que promuevan en su plataforma y plan de gobierno, para luego exigir el debido control de gestión de los funcionarios que con nuestro voto nos representarán. Por el otro, involucrándonos en la gestión pública, dado que esta es la única forma en la cual el Sector Privado le pondrá freno a los excesos del Sector Público.
Francisco Perdomo
abril 22, 2023 el 4:27 pm
Muy BUENO…!!! Precisamente este es nuestro programa en Unión Liberal. La implementación de las 5 Reformas Liberales: Reducción del Estado y Limitar el Gobierno,en funciones poderes y potestades, (Que solo se dedique a seguridad, justicia y obra pública) , Económica,(Flat Tax, Libre Mercado con apertura de TODOS los monopolios, declarar Zona Franca en TODO el territorio Nacional, Explorar y Explotar responsable los recursos naturales, (Oro, Gas Natural y Petróleo), Educación,(Las escuelas se concesionan y luego se venden a cooperativas de docentes con voucher escolar y libre elección de escuelas ) , Salud (Con libre elección Médica y Hospitalaria, las Clínicas EBAIS y Hospitales también se concesionan y luego se venden a cooperativas de personal de la salud), y Pensiones.(cambiar el sistema e reparto por el de capitalización personal con fondos e pensión privados). Protección temporal a los pobres durante la transición al Primer Mundo.
Luis Marin
junio 24, 2023 el 12:00 am
El pueblo puede vivir sin gobierno, el gobierno no puede vivir sin pueblo! Mantenemos con nuestros impuestos una HORDA de arrogantes e inútiles funcionarios que no sirven para NADA!
RECIBIMOS SERVICIOS PÉSIMOS, MEDIOCRES Y TENEMOS QUE AGUANTARNOS PORQUE ” ES LO QUE HAY”