Ambiente

Un modelo de desarrollo para la biosfera

Publicado

el

Tiempo de lectura: 4 min

RESUMEN

Día con día el ser humano celebra lo que considera sus mayores éxitos: aumento en la expectativa de vida, avances en la medicina en general, aumento de la capacidad productiva e innovación tecnológica, entre otros. Pero… ¿a qué costo? Los datos demuestran que estamos consumiendo los recursos naturales a una tasa mayor a la capacidad de la naturaleza de restaurar lo consumido. Se requiere un nuevo modelo de desarrollo que priorice la restauración del capital natural para luego generar el deseado progreso y bienestar humano.

Existe una marcada paradoja entre lo que concebimos como desarrollo y la huella que esa dinámica provoca en el ecosistema natural planetario.

Consideramos como éxitos humanos la expansión demográfica, la extensión de la expectativa de vida, los avances de la medicina, la capacidad de producción de alimentos, la habilidad de intercambiar bienes y servicios, y la exponencial invención tecnológica, para mencionar algunos.

Mientras tanto, hemos emitido en conjunto más de 30.000 millones de toneladas métricas de dióxido de carbono, hemos deforestado más de cuatro millones de hectáreas de bosque, hemos perdido más de seis millones de hectáreas de suelos por erosión, han aumentado en más de diez millones de hectáreas los desiertos del planeta, y hemos vertido casi nueve millones de toneladas de químicos tóxicos a la naturaleza. Estos datos son sólo para el año 2023[1], y cada año que ha transcurrido del presente siglo las estadísticas anuales han sido bastante similares. De manera colectiva, nos comportamos como si odiáramos la Tierra.

Hemos creído, por décadas, que el desarrollo sostenible consiste en encontrar un balance entre la economía, la sociedad y la naturaleza. A simple vista, estamos muy lejos de esa línea neutra de impacto ambiental que denominamos sostenibilidad. En la actualidad consumimos una cantidad de recursos naturales equivalente a 1.66 planetas Tierra cada año[2]. Quiere decir que estamos consumiendo recursos a una tasa mucho mayor a la biocapacidad planetaria, esto es, la vocación de la naturaleza de restaurar lo consumido. Si fuera una cuenta bancaria, podría decirse que estamos consumiendo los intereses y también una parte importante del principal cada año. Cualquier persona con conocimientos básicos en contabilidad, banca, finanzas o economía percibiría que, de continuar esa tendencia, los recursos se agotarán de manera irreparable.

Necesitamos un cambio de modelo económico con carácter de urgencia. La economía global se refiere a todos los intercambios de bienes y servicios con y sin fines de lucro que suceden entre seres humanos cada día en el mundo. Es importante subrayar que la economía depende de la humanidad para que funcione. También quiere decir que el ser humano fue quien la creó y es quien puede rediseñarla.

Por otro lado, la civilización cuenta con inmensa diversidad cultural e ideológica, la vocación plena de definir su propósito individual y colectivo, y también de libertad absoluta para dar rienda suelta a su espíritu emprendedor y practicar, inventar, crear y construir cualquier aptitud o emprendimiento que desee.

Por último – o quizás primero – está la biósfera, que son todas las especies que conforman la red de vida. Esta red comenzó a formarse hace unos 4,500 millones de años en la Tierra, gracias a la interacción entre el sol y la luna, el mar y las mareas, la tierra y el fuego. Para decir lo obvio, existe planeta Tierra sin biósfera pero no existe biósfera sin planeta Tierra. Del mismo modo, existe biósfera sin humanidad pero no existe humanidad sin biósfera.

El paradigma en el que vivimos en la actualidad mide, espera y celebra, mes con mes, que el valor monetario de la economía crezca, mientras que ve aumentar el sufrimiento de la civilización, y a la biósfera colapsar ante nuestros ojos en un planeta cada vez menos vivible.

El nuevo modelo de desarrollo que se requiere a escala global es uno que priorice la restauración del capital natural. Luego, que busque aumentar el progreso y el bienestar de la humanidad. Finalmente, que sea capaz de diseñar un nuevo modelo de negocio que monetice la creación de nuevo valor real para el bienestar de toda la biósfera.

Aunque en la teoría luce llamativo, parece fantasía concebir un modelo así en la práctica. Lo cierto es que, para quienes somos costarricenses, este es el modelo bajo el que nuestro país se ha desarrollado por más de 50 años. Grandes esfuerzos se han hecho para erradicar la deforestación, conservar vastas extensiones de mar y tierra en zonas protegidas y parques nacionales a perpetuidad, crear incentivos económicos para estimular la reforestación y consecuente regeneración de ecosistemas y biodiversidad, y diseñar industrias enteras basadas y orientadas hacia la naturaleza como lo es el turismo.

La nación costarricense, que conoce bien este modelo, está llamada a alzar la voz a nivel mundial sobre el modelo de desarrollo que restaura la viabilidad en la Tierra. Además, cada persona ciudadana de este país está convocada a estudiar a fondo el modelo, identificar áreas por mejorar y emprender ideas, propuestas, proyectos e iniciativas para robustecerlo. El propósito colectivo no es el de continuar sosteniendo la marca de país verde, sostenible y amigable con la naturaleza que ya tenemos. Esa es una consecuencia de nuestro actuar. Más bien, el propósito es llegar a ser un rincón del planeta donde todas las formas de vida sean bienvenidas y puedan habitar y desarrollarse dentro de los límites planetarios de la naturaleza para siempre.


[1] https://www.worldometers.info/

[2] https://www.footprintnetwork.org/resources/footprint-scenario-tool/


Las opiniones expresadas en este artículo son responsabilidad del autor y no representan necesariamente la postura oficial de Primera Línea. Nuestro medio se caracteriza por ser independiente y valorar las diversas perspectivas, fomentando la pluralidad de ideas entre nuestros lectores.

Dejar una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Trending

Exit mobile version